El director de la Fundación Pública de Medicina Xenómica ofreció una charla a los estudiantes de bachillerato
Por primera vez en su vida Ángel Carracedo ofreció ayer una charla sentado. La culpable fue una hernia de disco «por podar hortensias», confesó el director de la Fundación Pública de Medicina Xenómica ante los alumnos de segundo de bachillerato del instituto Eusebio da Guarda, a los que recordó que están en un curso muy complicado«onde hai que tomar moitas decisións, ademais de facer un gran esforzo intelectual. Calquera curso de Medicina é máis doado que segundo de bacharelato».
El científico quiso explicar a los jóvenes en qué consiste su trabajo, en el que cuenta con la colaboración de un grupo de 150 personas de 15 nacionalidades diferentes y que van desde biólogos a informáticos o farmacéuticos. Empezó hablando del principio de los tiempos y de cómo la aparición del ADN marcó el inicio de la vida, de que su mutación es responsable de la evolución y también de las enfermedades, y de que el descubrimiento del mapa genético supuso«unha revolución» científica.Carracedo también explicó en qué centran sus esfuerzos en su laboratorio, donde además de realizar pruebas de paternidad, colaboran con las fuerzas del orden analizando pruebas biológicas de los distintos casos, y realizan la identificación ósea de víctimas de catástrofes o epidemias.